Dar flores puede ser a la vez un gesto romántico y, por tanto, un paso en el camino de la seducción, y un error que prepara la entrada en el colorido mundo del osito de peluche, no muy diferente del llamado zona de amigos.
En el caso particular en el que usted está buscando recuperar a una ex novia, el ramo de flores que llega después de la pelea es un clásico y por tanto una elección válida. No hace falta decir que en este caso la mujer no debería estar furiosa. Hay que esperar a que pase la marea alta. De lo contrario, usted y el ramo podrían estar camino a la basura.
Pero es gracias a la televisión y al cine que generaciones enteras han adoptado la idea de que regalar flores a una mujer Es una técnica de seducción muy eficaz, un auténtico consejo para conquistar a cualquier mujer. Esto no es cierto en absoluto. Regalar flores no es una técnica seducción.
Pero ¿cuándo y cómo regalar flores a una mujer?
La pregunta es legítima pero la respuesta, como casi todas las preguntas sobre seducción, no es única. Por ello te ofrezco algunas instrucciones a seguir para saber cómo y cuándo ofrecer flores:
- Nunca regales flores en una primera cita.! El que se presenta con un ramo de rosas rojas no parece cauteloso y elegante sino desesperado. Además de parecer cursi, le harás creer que no conoces otra forma de llamar su atención que comprándole regalos.
- Ofrezca flores con originalidad. Debes intentar sorprender a la mujer de ninguna manera debe darse por sentado. El número debe gustarle pero también tener un toque de creatividad excitante para amplificar sus sensaciones.
- No los regales rosas rojas al principio. Estos representan el amor sensual y, por lo tanto, son fácilmente engañados mientras todavía la estás seduciendo. En su lugar, elige flores silvestres, bonitos tulipanes o amapolas de su color favorito (que siempre hay que tener en cuenta).
- Añade siempre un boleto. Aunque las entregues personalmente, las flores siempre deben ir acompañadas de una nota. Las flores se marchitan, una nota bien escrita puede durar para siempre. Escríbalo a mano, con la letra más clara y elegante que sea capaz de hacer. En el mensaje en sí, diluya la importancia del gesto, tal vez con un chiste que solo ustedes dos entenderían. No olvides firmarlo también.
- Sonríe con ligereza. Evita a toda costa el error común de convertir el simple gesto de regalar flores en un drama. Dígalo con serenidad, con aire divertido o con un poco de desapego irónico. ¡Esta es una pequeña reflexión y no una propuesta de compromiso!
- En caso de duda, pregunta al florista. Él es el asesor experto en esta circunstancia y puede tener la mejor idea empezando por el significado de las propias flores.
¿Cómo ofrecer flores?
En la mente de muchos hombres, debido a las influencias culturales antes mencionadas, existe la clásica escena en la que él, completamente vestido, se presenta en la puerta de ella con un gigantesco ramo de flores; abre la puerta con un vestido impecable pero sugerente y, encantada como si fuera el recién nacido al que acoge por primera vez en sus brazos, le imprime un apasionado beso en los labios.
Pero ¿cuál es la realidad de tal escena?
No es real en absoluto, a menos que la mujer en cuestión ya sea tuya. Por eso, para evitar decepciones innecesarias, imagina el gesto como algo insignificante y el ramo que llevas como un manojo de alcachofas. Un “gracias” indiferente de su parte no debería desanimarte. Además de sonreírles cuando se los entregues, intenta aligerar las cosas con un chiste tonto como: “Swarovski estaba cerrado, espero que no haga mucha diferencia”.
También tienes la posibilidad de haz que te los entreguen por un repartidor. Es una elección eficaz e igualmente impredecible: avergüenza menos a la mujer que se siente muy avergonzada por tu presencia pero avergüenza más a la mujer que aún estás conociendo.
Si eliges que se lo entreguen en su casa, asegúrate de que su situación no sea prohibitiva: que no tenga ya novio o marido, o que sus padres no puedan enfadarse.
Ni se te ocurra dejar que los encuentre sobre su escritorio como sugieren las películas americanas. Es casi imposible que ella esté encantada y sus compañeros llenos de admiración y envidia. Recuerda que estás en el planeta Tierra, en Italia. Sólo la avergonzarías.
En conclusión
Discreción —Esto es lo que debes mostrar cuando vayas a regalar flores a una mujer.